La participación electoral en las Elecciones Legislativas 2025 alcanzó apenas el 66% del padrón nacional, el nivel más bajo desde el retorno de la democracia en 1983. El dato fue confirmado por la Dirección Nacional Electoral (DINE) tras el cierre de los comicios a las 18, y despertó preocupación en todo el arco político y académico.
Este domingo, más de 36 millones de argentinos estaban habilitados para emitir su voto y renovar parte del Congreso de la Nación: 127 bancas en la Cámara de Diputados y 24 en el Senado. La jornada transcurrió con normalidad en todo el país, sin incidentes relevantes ni demoras significativas, y fue la primera elección legislativa nacional que se realizó con el sistema de Boleta Única de Papel (BUP).
Un récord histórico de baja participación
El 66% de asistencia representa una caída de cinco puntos respecto a 2021 (cuando votó el 71% del padrón) y de once puntos frente a 2023, año en que se eligió presidente y participó el 77% de los ciudadanos.
La cifra rompe un registro histórico: desde 1983, cuando más del 85% de los argentinos acudió a las urnas en las primeras legislativas de la democracia, nunca se había registrado una concurrencia tan baja. El contraste muestra una tendencia sostenida a la baja, que preocupa tanto por su significado político como por el impacto en la representatividad institucional.