Pagar impuestos es una obligación tan odiada como persistente, y necesaria, a lo largo de la historia. A la obvia impopularidad de afrontarlos económicamente se suma que pagar tributos suele ser un dolor de cabeza, inclusive un misterio para la mayoría de los argentinos y pesa cada vez más en las estructuras de costos de los comerciantes, monotributistas y pequeñas empresas.
Dentro del amplio menú de imposiciones, la sociedad tiene sus “preferidas” a la hora de la queja. Así lo refleja un informe realizado en abril entre casi 2.000 personas de todo el país. A nivel general, confirma una tendencia persistente: el rechazo masivo al sistema tributario vigente: el 78 % de los consultados opina que es injusto, y el 60% admite no entender cómo se calcula lo que se paga.
A la hora de ponerle nombre al pesar, Ingresos Brutos se convirtió en el símbolo del hartazgo fiscal: reduce márgenes, obliga a subir precios y suma burocracia, señalaron los consultados.
Solo el 5% cree que lo tributado por Ingresos Brutos luego no se traslada a precios, mientras que el 80% considera que el pago del gravamen tiene incidencia en las góndolas.
La percepción de injusticia y falta de claridad amenaza con ampliar la economía informal, deteriorar la base tributaria y desalentar la inversión. El informe refleja una pérdida de confianza de los argentinos respecto de la recaudación: no sólo cuánto se paga sino a qué se destina ese dinero.
• El foco del malestar: 70 % afirma que Ingresos Brutos perjudica su actividad porque se cobra “haya o no ganancias”.
• Impacto en precios: 58 % cree que el impuesto se traslada “directamente” al consumidor; solo 5 % piensa que no se traslada.
• Carga impositiva: 83 % de comerciantes y emprendedores define su presión fiscal como “moderada o alta”; en CABA y GBA el dato sube a 75 % que la ve “alta o muy alta”.
• Desconexión y desconfianza: 8 de cada 10 menciones en redes sobre impuestos son negativas y la mayoría no sabe si paga a Nación o a Provincia.
• Uso de los fondos: el 80 % cree que las provincias son las mayores beneficiadas y exige más transparencia; Salud (64 %), Educación (60 %) y Seguridad (52 %) son los destinos que la gente prioriza.
“Impulsamos esta investigación con el objetivo de aportar datos a una conversación siempre vigente: cómo se percibe el sistema tributario en la Argentina. Particularmente, Ingresos Brutos es percibido como un impuesto que afecta márgenes, encarece precios y desalienta la actividad formal. El informe busca nutrir el debate público con evidencia, contexto y perspectiva, entendiendo qué es lo que piensan y sienten los argentinos y así poder proyectar una mirada estratégica", explicó Joaquín Molina, director de Insights en Taquion, la firma que desarrolló la investigación.