La actividad de la construcción mostró una recuperación interanual en junio, aunque las expectativas de las empresas para el próximo trimestre se mantienen cautelosas.
Según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), el Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) registró una suba de 13,9% respecto al mismo mes del 2024, con un alza acumulada del 10,8% en el primer semestre del año.
En comparación con mayo, la actividad creció 0,9% en términos desestacionalizados. Sin embargo, la serie tendencia-ciclo cayó 0,8% mensual, lo que revela una dinámica dispar entre corto y mediano plazo.
Insumos en alza, excepto yeso y cal
La recuperación se reflejó con fuerza en el consumo de insumos. En términos mensuales, se destacaron los aumentos en:
- Mosaicos graníticos y calcáreos (+62,9%)
- Asfalto (+51,5%)
- Artículos sanitarios de cerámica (+47,9%)
- Pisos y revestimientos cerámicos (+44,3%)
- Hormigón elaborado (+28,5%)
- Hierro y acero para la construcción (+27%)
También subieron las placas de yeso (+19,3%), cemento portland (+11,6%), pinturas (+5,7%) y ladrillos huecos (+2,2%). Solo el yeso (-4,5%) y las cales (-3,9%) mostraron retrocesos.
En el acumulado de enero a junio, el asfalto (+65,6%), los artículos sanitarios (+31,5%) y las placas de yeso (+27,8%) lideraron las subas, mientras que el rubro "resto de insumos" fue el único que cayó (-3,2%).
Más superficie autorizada, menos empleo acumulado
En mayo, los permisos de edificación en 246 municipios crecieron 7,5% interanual y acumularon una mejora del 5% en cinco meses.
Por el contrario, el empleo registrado en el sector mostró signos mixtos: subió 4,1% interanual en mayo, pero acumuló una baja del 1,3% entre enero y mayo frente al mismo período de 2024.
Empresas sin entusiasmo: estabilidad o caída
La encuesta cualitativa realizada por el INDEC entre grandes empresas reveló que la mayoría prevé estabilidad en la actividad durante el período julio-septiembre.
En obras privadas, el 69,3% no espera cambios, el 20,8% anticipa una baja y solo el 9,9% proyecta un aumento.
En obra pública, las cifras son similares: 64,5% cree que seguirá igual, 18,8% estima una caída y 16,7% augura una mejora.
Entre las causas de crecimiento señaladas por las firmas privadas figuran "el crecimiento de la actividad económica" (31,7%) y "la estabilidad de precios" (21,7%). Para la obra pública, los motivos más citados fueron "estabilidad de precios" (27,1%) y "reinicio de obras" (22,9%).
En cambio, entre las razones que explicarían una caída, las empresas apuntaron principalmente a "la baja de la actividad económica" (38,1% en el sector privado y 31,4% en el público) y "los altos costos de construcción".
¿Qué tipo de obras se vienen?
En obras privadas, las empresas se enfocarán en:
- Montajes industriales (16,2%)
- Edificios comerciales (13,3%)
- Edificios industriales y otras obras de arquitectura (12,6% cada uno)
- Viviendas (11,2%)
Para obra pública, el énfasis estará en:
- Obras viales y pavimentación (23,2%)
- Arquitectura (16,1%)
- Distribución de agua y cloacas (10,9%)
- Edificios educacionales (9,2%)
- Viviendas (9,1%)
Necesidad de alivio fiscal y crédito
Las políticas más esperadas para incentivar la actividad son las reducciones en cargas fiscales (26,1% en el sector privado y 24,9% en el público) y el acceso a créditos para construcción (20,7% y 22,2%, respectivamente).
Las necesidades crediticias se mantendrían estables, según el 43% de las empresas privadas y el 46,2% de las que ejecutan obra pública. En ambos casos, los bancos privados nacionales son la principal fuente de financiamiento.
Aunque los números de junio reflejan un repunte tras meses de estancamiento, el diagnóstico empresarial expone un escenario con techos bajos: poca confianza en el crecimiento a corto plazo, costos elevados y empleo en retroceso. La recuperación, por ahora, no se traduce en entusiasmo.