A poco de finalizar el plazo para la presentación de los frentes electorales en Salta, un sector del Partido Renovador de Salta dio el batacazo y emitió un comunicado en el que señalaron un "cercenamiento" en la participación electoral a raíz de los hechos ya conocidos y denunciados: se llamó a una convención de urgencia, en la que no participaron todos los convencionales (solo hubo representantes de 7 de los 23 departamentos), y en ella se decidió apoyar a Durand como candidato a intendente capitalino, algo que, a las claras, no fue del agrado de muchos renovadores que ahora irán en la vereda del frente, al menos en las elecciones de Salta Capital.
Además, en el mismo documento, recordaron que en los comicios pasados fueron junto a Gustavo Sáenz pero en el espacio "no peronista" y ahora quieren repetir la experiencia. Por ende este sector del PRS aseguró que acompañarán a Bettina Romero en la búsqueda de la re elección como jefa comunal capitalina.
Al respecto, Oscar Rocha Alfaro, en conversación con Agenda/Salta señaló que desde este sector renovador que renegó de la decisión de Jorge Oscar Folloni: "queremos tener un Partido Renovador modernizado y eso consiste en transitar esta etapa y acompañar a la intendenta y aportarle experiencia en gestión, grosor político al esquema del ejecutivo municipal y al frente Salta Nos Une", dijo.
Luego dio algunos detalles de la convención trunca que se convocó de emergencia y a la que solo una parte del PRS pudo acceder. "Había solo 10 convencionales de la capital de un total de 23; y había 14 convencionales del interior, que no entendían porque tenían que votar una moción capitalina, porque además ese fue un planteo que no estaba en la orden del día, y se lo planteó ahí en la propia convención", acotó Rocha Alfaro. "Fue una imposición forzada que significa una suerte de agravio político", explicó y especificó que se trata de "una decisión que no se podía acompañar".
Así también, Rocha Alfaro señaló que "resulta forzado llevar un sello electoral [por el PRS], a un sector de la alianza que ha tenido siempre una decisión política permanente en cada uno de los municipios durante largos años. En el caso de la capital, la preocupación de no entender la definición tan rápida o la convicción de acompañar a una precandidatura en forma excluyente. Me parece que ese cercenamiento de la participación y de discusión, que hasta se podría decir estrategia, aunque no la hubo y eso nos generó el camino que lo manifestamos internamente el viernes hacia todos los dirigentes del partido que entienden que resulta contraproducente competir desde el frente Gana Salta en toda la provincia y que entiende que también pueden salir por Unidos Por Salta, más allá de que no lleven el sello partidario".
